A sus 50 años José Pablo Fernández Sánchez reflexiona sobre su vida en las carreras atléticas.
De aspecto juvenil, rostro amigable y bigote tupido nos confiesa que “la flojera” es un gigante que aplasta las voluntades más inquebrantables.
”La disciplina y la perseverancia son dos armas que me han ayudado a combatir la pereza para regresar a este maravilloso deporte”.
José Pablo estuvo alejado 10 años de las carreras atléticas de fondo, un deporte que había practicado desde principios de los 80’s.
“Soy electricista y padre de 3 chavos, con lo que ganaba en Mérida no me alcanzaba.Emigré a los Estados Unidos en donde estuve laborando algunos años, con el dolor de mi corazón tuve que colgar los tenis”.
A su regreso, con 8 kilos demás, “maleado” por su nueva vida, cómoda y sedentaria, olvidó el deporte.
Bastaron unos meses para que los problemas de salud surgieran: mareos, entumecimientos y zumbido en los oídos se le presentaron de manera crónica.
“Gracias a los cuates con los que comparto el trote nuestro de cada día estamos superando el tedio, el desinterés y con positivismo, también el estrés y las adversidades”.
Reapareció en la Nocturna de la Independencia 2007, posteriormente participó en la Nissan-Autotal y en la Carrera del Pavo.
Este año ha escalado el podio en 4 ocasiones, en la categoría veteranos.
“Algunos corredores de mi edad me han protestado, porque luzco joven piensan que soy cachirul.Les recuerdo que corro desde los años 80's”.
JOSE PABLO EL ENTRENADOR
”Vencer la pereza no es fácil, para lograrlo es necesario tener actitud, un carácter positivo y perseverante”.Estas palabras les inculca José Pablo a sus discípulos.
José Pablo entrena todas las mañanas y tardes en la pista de césped de la UTM.
Puchi vida...!
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